Puede ser que te digan que estás loca, que lo que estás haciendo está fuera de la realidad, pero justo perseguir sueños que están fuera de la realidad es lo que va a genera los nuevos mundos que queremos e imaginamos para nosotras. Hay más locas como nosotras y nos vamos a encontrar."
Lulú era una niña muy valiente y libre, a la que le gustaba mucho nadar. Un día fue con su familia a un balneario y eligió al tobogán más alto para aventarse. No tenía miedo porque sabía que su papá estaría al final para atraparla.
Sus papás siempre la apoyaron y le dieron la confianza para que ella pudiera lograr lo que se propusiera. Cuando ella y su familia se mudaron de la Ciudad de México a Monterrey, se encontró con que no siempre la sociedad permite que las mujeres sean tan libres como quisieran, y eso la hizo sentir muy frustrada y triste.
Me di cuenta que las reglas las escribíamos las personas y como las escribimos nosotras, las podemos cambiar también.”
En un par de viajes al extranjero, Lulú vivió experiencias y conoció a mujeres que le hicieron comprender que muchas de las noticias, películas e imágenes sobre mujeres tienen un efecto en nuestra visión del mundo y reproducimos la idea de cómo debemos ser.
Lulú sabía que tenía que hacer algo para que las mujeres pudieran ver que había otras posibilidades de vida. Junto con otras mujeres igual de talentosas y luchadoras fundó una plataforma para crear nuevos contenidos y a dar talleres y pláticas sobre internet y derechos humanos.
Hay un montón de mujeres que están transformando el mundo. Necesitamos contar sus historias para que otras mujeres se inspiren y sepan que hay otras posibilidades de vida. Contar historias tiene un poder transformador.”
A pesar de que hay personas que han intentado terminar con el trabajo de Lulú y la han hecho sentir miedo, ella ha salido adelante porque sabe que, como ella, hay muchas personas defensoras que buscan cambiar el mundo y cuando están juntas se hacen más fuertes
Lulú Barrera nació en la Ciudad de México.
Ilustrada por Frida Kadavre.