Hoy entiendo que ser LGBT+ es un acto de resistencia, un obsequio de resiliencia. A ti que lees estas líneas te digo: no estás sola, no estás solo, no estás sole, habemos muchas personas luchando por tí. Eres una persona bella y perfecta, tal y como eres. "
Había una vez una niña que se llamaba Paola, le gustaban mucho los animales y soñaba con ayudar a las personas. Desde pequeña, Paola sabía que se sentía atraída por las niñas, pero tenía miedo de decirlo. Cuando lo contó, sus padres y maestros, éstos rechazaron su orientación sexual y se vio obligada a ocultar su orientación para sobrevivir.
En el mundo, existen personas que piensan que la orientación sexual es algo que se debe corregir pero están equivocadas. Lamentablemente, Paola fue víctima de intentos por cambiarla y en un pequeño cajón en el fondo de su corazón guardó esas terribles experiencias.
Aunque Paola durante mucho tiempo sintió pena y vergüenza, no perdió la esperanza de sentirse libre. Un día asistió a una marcha de la comunidad LGBTI+, y por primera vez se sintió identificada y acompañada. Ahí conoció a un grupo de activistas como ella y se sintió en un espacio seguro. Por fin, pudo abrir su corazón y contar sus experiencias. Desde entonces no volvió a callarse.
Encontré una comunidad, pude decidir ponerle un alto a la violencia que vivía en casa, mandarle amor a mis padres, desearles su sanación y continuar con mi vida. Entendí que ser quien soy estaba bien y aprendí lo que es el amor propio."
Paola es una mujer valiente, que entendió que las experiencias personales pueden influir en la política para así transformar la realidad de las personas. Actualmente, sigue luchando para que ninguna persona viva lo que ella tuvo que pasar.
Paola Santillán nació en la Ciudad de México.
Ilustrada por Adriana Flores Mercado.