Carta abierta del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, sobre las prioridades para una acción climática basada en derechos humanos en la 29ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático

1. Alinear los compromisos climáticos con los derechos humanos y la ciencia

Se espera que todos los Estados renueven sus contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC, por sus siglas en inglés) para la 30ª Conferencia de las Partes de la CMNUCC el próximo año. Insto a cada gobierno a alinear sus compromisos climáticos con sus obligaciones de derechos humanos. Esto requiere una ambición transformadora para mantener el objetivo de 1,5 grados Celsius al alcance, guiándose a la vez por los derechos humanos y la ciencia más reciente, incluyendo los hallazgos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático. Las personas, especialmente aquellas más afectadas por el cambio climático, también deben estar involucradas de manera significativa en la formulación, implementación, monitoreo y revisión de las NDC.

2. Aumentar la responsabilidad de las empresas

Según el derecho internacional de los derechos humanos, los Estados tienen la obligación de tomar medidas adecuadas para proteger a las personas de los daños a los derechos humanos causados por empresas, responsabilizar a las compañías y garantizar el acceso a reparación para las víctimas cuando ocurren estos daños. Esto incluye daños a los derechos humanos que resulten del cambio climático. Las empresas también tienen responsabilidades, como respetar los derechos humanos y brindar acceso a la reparación, según lo establecido en los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos de la ONU (Principios Rectores). Les insto a tomar medidas efectivas para responsabilizar a las empresas por sus contribuciones al cambio climático y garantizar el acceso a recursos.

A todos los Representantes Permanentes

de los Estados Miembros y Observadores Permanentes

de los Estados no Miembros ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra

Además, deben integrarse salvaguardias de derechos humanos [basadas en los Principios Rectores] en los esfuerzos para movilizar recursos del sector privado bajo el nuevo objetivo colectivo cuantificado sobre financiamiento y para operacionalizar los mercados de carbono bajo el Artículo 6.4 del Acuerdo de París. Para avanzar en la rendición de cuentas, el papel de las empresas, incluyendo las compañías estatales, en las negociaciones climáticas debe ser más transparente. Finalmente, es urgente eliminar gradualmente los combustibles fósiles, comenzando con una eliminación equitativa e inmediata de los subsidios y una prohibición de la publicidad de combustibles fósiles.

3. Respaldar los compromisos climáticos con una adecuada movilización de recursos basada en los derechos humanos

En la COP29, los Estados tienen la oportunidad de adoptar un nuevo objetivo colectivo cuantificado en materia de financiamiento climático. Este objetivo debe ser mucho más ambicioso que su predecesor [en términos de billones en lugar de miles de millones], satisfaciendo las necesidades globales reales para la acción climática, incluidas las relacionadas con la mitigación, adaptación y pérdidas y daños. Será necesario revisar periódicamente el objetivo para asegurar un financiamiento que respete las obligaciones de derechos humanos y que sea adecuado, efectivo y accesible para las personas y países que más lo necesitan. Para esto, mi Oficina insta a priorizar el financiamiento público, basado en donaciones y concesiones, que tenga en cuenta los derechos humanos, incluyendo la igualdad de género y los derechos de las personas en situaciones vulnerables; y que se obtenga de acuerdo con los principios de equidad, responsabilidades comunes pero diferenciadas y capacidades respectivas, y quien contamina paga.

4. Cumplir los derechos de las personas desproporcionadamente afectadas por el cambio climático

Con muchas personas ya afectadas por el cambio climático en todo el mundo, la adaptación y las pérdidas y daños son prioridades urgentes de derechos humanos. La COP29 representa una oportunidad crucial para que los Estados aseguren recursos y atención adecuados a estos temas, incluyendo la implementación del Objetivo Global de Adaptación, el desarrollo de Planes Nacionales de Adaptación y la movilización de recursos para pérdidas y daños.

5. Defender los derechos de las personas a participar, la libertad de expresión y de reunión

En todo el mundo, he escuchado preocupaciones crecientes sobre las represalias contra la libertad de expresión y el activismo de los defensores de los derechos humanos ambientales, incluyendo el enjuiciamiento, hostigamiento, detención ilegal e incluso asesinatos, y sobre la falta de acceso y transparencia en la toma de decisiones climáticas. Aquellos que defienden el derecho humano a un ambiente limpio, saludable y sostenible a menudo incluyen a los Pueblos Indígenas, campesinos, personas de ascendencia africana, jóvenes y comunidades locales. El racismo en el ámbito ambiental aumenta el riesgo de daños relacionados con el medio ambiente, junto con la exclusión de la toma de decisiones, la participación, el acceso a la información y a la justicia. Les insto a asegurar que los titulares de derechos sean incluidos de manera significativa en la toma de decisiones ambientales, incluyendo en la COP29.

Ahora, más que nunca, son esenciales soluciones basadas en derechos humanos para abordar la crisis climática, prestando atención especial a aquellos más impactados por el cambio climático y exigiendo que los más responsables tomen las medidas urgentes necesarias para abordar y reparar el daño causado. Mi Oficina está preparada para apoyar a los gobiernos y otros actores en este sentido. Espero nuestra continua colaboración.

Por favor acepte, Excelencia, la seguridad de mi más alta consideración.

Volker Türk

* Traducción no oficial