COVID-19 podría empujar a millones de personas a la explotación o la esclavitud, advierte un experto de la ONU
GINEBRA (16 de septiembre de 2020) – COVID-19 corre el riesgo de empujar a millones de niños, mujeres y hombres a las formas contemporáneas de esclavitud y otras formas de explotación a menos que los gobiernos actúen ahora para protegerlos, advirtió hoy un experto en derechos humanos de las Naciones Unidas.
“Los niveles históricos de subempleo o desempleo, la pérdida de medios de subsistencia y las perspectivas económicas inciertas son algunas de las complejas consecuencias de la pandemia COVID-19 que han golpeado más duramente a los más vulnerables”, dijo Tomoya Obokata, relator especial sobre las formas contemporáneas de la esclavitud, al presentar su informe al 45º período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos.
“En combinación con las débiles redes de seguridad y el desmantelamiento de los derechos laborales y las normas de protección social en algunos países, existe un grave riesgo de que los más pobres sean empujados al trabajo en condiciones de servidumbre, al trabajo forzoso o a otras formas contemporáneas de esclavitud para sobrevivir”, dijo.
“Los Estados pueden considerar el desmantelamiento de los derechos laborales como una solución rápida a la luz de la creciente presión sobre las empresas como consecuencia de la recesión económica mundial”, dijo Obokata. “A largo plazo, sin embargo, estos mismos Estados pagarán un alto precio por eliminar la protección y la dignidad de las personas en el trabajo”.
En particular, pidió rendición de cuentas a las empresas que explotan a los trabajadores vulnerables que producen, procesan y suministran medicamentos, equipo médico o equipo de protección personal (PPE) durante la pandemia.
“Los derechos laborales deben ser respetados y la protección social garantizada en todos los sectores económicos”, dijo. “Los Estados deben garantizar que en el contexto de la pandemia de COVID-19, nadie se quede atrás y sea empujado a prácticas de esclavitud”.
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